La mermelada de sandía es una deliciosa y refrescante variante de las conservas dulces. Su sabor suave y ligeramente dulce la hace perfecta para untar en pan o acompañar quesos. Además, su vibrante color rosa la convierte en una opción atractiva para decorar postres y crear cócteles frutales.
Ingredientes:
- 1 sandía madura (aproximadamente 4-5 libras)
- 4 tazas de azúcar
- 1/4 de taza de jugo de limón
- 1 sobre de pectina en polvo (opcional, para ayudar a que la mermelada espese)
Asegúrate de elegir sandías maduras y dulces para obtener una mermelada sabrosa. También, recuerda retirar las semillas antes de comenzar la preparación.
Preparación:
1. Lava y pela la sandía, retirando las semillas y cortándola en cubos pequeños. Deberías tener alrededor de 8-10 tazas de sandía picada.
2. En una olla grande, agrega la sandía picada, el azúcar y el jugo de limón. Mezcla bien.
3. Si deseas que la mermelada tenga una consistencia más espesa, puedes agregar el sobre de pectina en polvo en este punto. Sigue las instrucciones del paquete de pectina para asegurarte de utilizarla correctamente.
4. Lleva la mezcla a ebullición a fuego medio-alto, revolviendo ocasionalmente para evitar que se queme. Una vez que hierva, reduce el fuego a medio-bajo y cocina a fuego lento durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la mermelada se haya espesado y tenga una consistencia deseada. De vez en cuando, puedes retirar la espuma que se forme en la superficie.
5. Para comprobar la consistencia de la mermelada, puedes hacer una prueba en un plato frío. Coloca una pequeña cantidad de mermelada en el plato y espera unos minutos. Si se forma una piel o gel, la mermelada está lista. Si no, continúa cocinando y repite la prueba hasta que esté listo.
6. Una vez que la mermelada esté lista, retira la olla del fuego y deja que se enfríe durante unos minutos.
7. Llena frascos esterilizados con la mermelada caliente, dejando un espacio de aproximadamente 1/4 de pulgada en la parte superior. Cierra los frascos herméticamente.
8. Coloca los frascos en una olla grande con agua hirviendo, asegurándote de que estén completamente sumergidos. Hierve los frascos durante unos 10 minutos para esterilizarlos y sellarlos adecuadamente.
9. Retira los frascos del agua hirviendo y déjalos enfriar a temperatura ambiente. A medida que se enfríen, deberías escuchar el característico sonido de «pop» que indica que los frascos se han sellado correctamente.
10. Almacena los frascos en un lugar fresco y oscuro. La mermelada de sandía casera generalmente se conserva durante varios meses si los frascos están sellados adecuadamente.
¡Disfruta de tu mermelada de sandía casera en pan tostado, galletas o como más te guste!